El Rey Felipe tiene a Cataluña en la lista de las principales preocupaciones, al menos según su acostumbrado mensaje de Navidad, hecho público el martes a las 21 horas, hora local.
Tras mencionar la nueva era tecnológica, el futuro de la UE, las migraciones, las diferencias entre hombres y mujeres, el cambio climático, el mercado laboral y la desconfianza en las instituciones, el jefe del Estado español afirmó que «por supuesto que Cataluña» es otra «seria preocupación» para los españoles.
Inmediatamente después, mencionó que España está en camino de elegir un nuevo presidente. La apuesta de Pedro Sánchez por mantenerse en el poder está sujeta al apoyo de la independentista Esquerra Republicana, con la que está manteniendo conversaciones y que podría sellar un acuerdo en los próximos días.
Aunque Felipe VI no hizo ninguna mención más explícita a la crisis de Cataluña, sí pidió que todo el mundo tuviera «respeto a la Constitución» para «preservar» la unidad de España.
El monarca también expresó su «deseo de armonía» en el país y mencionó la responsabilidad, el afecto, la generosidad, el diálogo y el «respeto entre personas de ideologías muy diferentes» como principales contribuyentes para alcanzar la armonía entre los ciudadanos.
Sin embargo, en su sexto mensaje de Navidad, no desarrolló más la necesidad de diálogo.
Aproximadamente dos meses y medio después del veredicto de culpabilidad de los líderes independentistas, Felipe VI también dejó claro que, según él, España es «un Estado social y democrático de derecho».
Terminó su discurso, totalmente en español, deseando una feliz Navidad en euskera, catalán y gallego.